Salsa de Miel y Mostaza con toque de Jengibre
Introducir pequeñas variaciones en recetas tradicionales puede ser una gran fuente de innovación.
En este caso, hemos cambiado el tradicional toque de la pimienta negra por el del jengibre.
La pimienta negra es el fruto de la planta Piper nigrum, originaria de la India. La pimienta negra tiene un sabor más intenso que la blanca, con un ligero dulzor predominando su sabor picante.
El jengibre fresco, por su parte, modifica su perfil de sabor dependiendo de dónde se cultive, pero en general, tiene un perfil de sabor alimonado, leñoso y terroso con un toque picante.
La variedad cultivada en Nigeria y Sierra Leona se diferencia de la Jamaicana en que posee un aroma alcanforado en lugar de alimonado, asemejandose al cardamomo. Se dice que la variedad australiana es la más alimonada dado que su aceite posee un mayor contenido en citral (causante del sabor a limón).
Su sabor especiado, picante y penetrante, con un toque ligeramente dulzón, combina perfectamente con la salsa de Miel-Mostaza, convirtiéndola en una mezcla excelente para completar tus recetas y elaboraciones culinarias.
Por su sinergia de sabor, te recomendamos servirla, por ejemplo, como acompañante de bastones de berenjena frita o napando un tartar de berenjena.